Pasta Frola con Aceite: Un Viaje a la Tradición y el Sabor

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La **Pasta Frola** es un clásico de la repostería argentina que ha conquistado paladares en todo el mundo. Su combinación de una masa suave y un relleno dulce la convierte en una opción irresistible para cualquier ocasión. En este artículo, te invitamos a descubrir los secretos de esta deliciosa tarta, que no solo es un deleite para el paladar, sino también un viaje a las tradiciones culinarias de América Latina.

## Un Poco de Historia

La Pasta Frola tiene sus raíces en la cocina italiana, donde se conoce como “pasta frolla”. Esta masa dulce se utiliza en una variedad de postres, pero en Argentina ha tomado un giro único, adaptándose a los ingredientes locales y a los gustos de su gente. Tradicionalmente, se rellena con dulce de membrillo, pero las variaciones son infinitas: desde dulce de leche hasta mermeladas de frutas, cada familia tiene su propia versión.

### ¿Por Qué Elegir Pasta Frola con Aceite?

La receta que te presentamos hoy es una versión de Pasta Frola que utiliza aceite vegetal en lugar de mantequilla. Esta elección no solo la hace más ligera, sino que también la convierte en una opción apta para quienes buscan reducir el consumo de grasas saturadas. Además, el aceite aporta una textura suave y húmeda a la masa, lo que la hace aún más deliciosa.

## Ingredientes: La Base de un Gran Postre

Para preparar esta exquisita Pasta Frola con Aceite, necesitarás los siguientes ingredientes:

– **250 g de harina de trigo**: La base de nuestra masa, que le dará estructura y suavidad.
– **100 g de azúcar**: Para endulzar y equilibrar los sabores.
– **1 huevo y 1 yema**: Aportan humedad y ayudan a unir los ingredientes.
– **100 ml de aceite vegetal**: La estrella de esta receta, que reemplaza a la mantequilla.
– **1 cucharadita de esencia de vainilla**: Para un toque aromático que realza el sabor.
– **Ralladura de 1 limón**: Un toque cítrico que refresca el paladar.
– **1 cucharadita de polvo de hornear**: Para que la masa suba y quede esponjosa.
– **500 g de dulce de membrillo**: El relleno clásico, pero puedes usar el dulce que prefieras.
– **2 cucharadas de agua**: Para disolver el dulce y lograr una consistencia untable.
– **Una pizca de sal**: Para realzar todos los sabores.

## Preparación: Un Proceso Sencillo y Gratificante

### Paso 1: Preparar el Dulce

Comenzamos calentando el dulce de membrillo con las dos cucharadas de agua en una cacerola a fuego bajo. Este paso es crucial, ya que queremos que el dulce se ablande y adquiera una consistencia untable. Mientras lo haces, el aroma del membrillo comenzará a llenar tu cocina, creando una anticipación deliciosa. Una vez que esté listo, reserva y deja enfriar.

### Paso 2: Preparar la Masa

En un bol grande, tamiza la harina junto con el polvo de hornear y la pizca de sal. Este paso no solo elimina grumos, sino que también airea la harina, lo que resulta en una masa más ligera. Agrega el azúcar y mezcla bien.

En otro recipiente, bate ligeramente el huevo y la yema. Luego, añade el aceite, la esencia de vainilla y la ralladura de limón. Esta mezcla líquida es la que aportará sabor y humedad a nuestra masa. Vierte esta mezcla en el bol con los ingredientes secos y mezcla con una espátula o cuchara de madera hasta formar una masa homogénea. Si notas que la masa está muy seca, puedes añadir un poco más de aceite o una cucharada de agua, pero asegúrate de que no quede pegajosa.

### Paso 3: Armar la Tarta

Precalienta el horno a 180°C (350°F). Extiende el resto de la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada, hasta que tenga un grosor de aproximadamente medio centímetro. Forra un molde para tarta (aproximadamente 24 cm de diámetro) con la masa, presionando bien los bordes.

Ahora, es el momento de rellenar. Distribuye el dulce de membrillo sobre la base de masa, asegurándote de que quede bien cubierto. Este es el momento en que la tarta comienza a tomar forma y el aroma del dulce comienza a invadir el ambiente.

### Paso 4: Decorar y Hornear

Con la masa que reservaste, forma tiras y colócalas sobre el relleno en forma de enrejado. Este paso no solo es decorativo, sino que también permite que el calor del horno penetre en el dulce, asegurando que se cocine de manera uniforme.

Lleva la tarta al horno precalentado y hornea por 25-30 minutos, o hasta que la masa esté dorada y cocida. La espera puede parecer larga, pero el aroma que se desprende del horno hará que valga la pena.

### Paso 5: Enfriar y Servir

Una vez que la tarta esté lista, déjala enfriar antes de desmoldar y servir. Este es un paso importante, ya que permite que la masa se asiente y que los sabores se integren. ¡Y ahora, el momento que todos estaban esperando: disfrutar de tu Pasta Frola con Aceite!

## Variaciones y Consejos

La Pasta Frola es un lienzo en blanco que puedes personalizar a tu gusto. Aquí te dejamos algunas ideas para que experimentes:

– **Dulce de Leche**: Si prefieres un sabor más dulce, el dulce de leche es una excelente opción. Su cremosidad complementa perfectamente la masa.
– **Frutas Frescas**: Agregar frutas frescas como manzanas o peras al relleno puede aportar un toque fresco y jugoso.
– **Especias**: Experimenta con canela o nuez moscada en la masa para un sabor más cálido y acogedor.

## Conclusión: Un Postre que Une

La Pasta Frola con Aceite no es solo un postre; es una experiencia que une a las familias y amigos en torno a la mesa. Cada bocado es un recordatorio de las tradiciones, de los momentos compartidos y de la alegría de cocinar. Te invitamos a que prepares esta receta y la compartas con tus seres queridos.

No olvides que la cocina es un arte, y cada receta es una oportunidad para expresarte. Así que, ¿qué esperas? ¡Anímate a probar esta deliciosa Pasta Frola y descubre por ti mismo por qué es un clásico atemporal!

Y si te ha gustado esta receta, no dudes en seguir explorando más delicias que la cocina tiene para ofrecer. ¡La aventura culinaria apenas comienza!

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