PASTEL DE MERENGUE DE LIMÓN

El pastel de merengue de limón es un postre refrescante y delicioso que combina la acidez del limón con la dulzura del merengue, creando una experiencia de sabor única. Este postre es una opción ideal para cualquier ocasión, desde una cena familiar hasta una celebración especial. A continuación, te presentamos una receta detallada que te permitirá preparar este exquisito pastel en casa.

Ingredientes

Para la base:
1 huevo
50 g de azúcar
50 g de harina
40 ml de aceite
3 g de levadura en polvo
Ralladura de limón

Para la mousse de limón:
2 huevos
2 limones de jugo
50 g de azúcar
15 g de mantequilla
1 hoja de gelatina (3 g)
200 ml de nata para montar sin azúcar

Para el merengue:
150 g de azúcar
50 g de agua
2 huevos
1 pizca de sal

Preparación

Paso 1: Preparación de la base
Para comenzar, en un recipiente adecuado, bate un huevo juntamente con 50 g de azúcar y la ralladura de limón hasta que la mezcla esté bien combinada y ligeramente espumosa. A continuación, añade 40 ml de aceite, 50 g de harina y 3 g de levadura en polvo. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea. Una vez lograda la consistencia deseada, vierte la masa en un molde previamente engrasado y hornea a 180° durante 9 minutos, o hasta que la base esté dorada y cocida al tacto. Este tiempo puede variar un poco según el horno, así que es recomendable estar atento a que no se dore en exceso.

Paso 2: Preparación de la mousse de limón
Mientras la base se enfría, es hora de preparar la mousse de limón. En una cacerola, mezcla 50 g de azúcar con la ralladura y el jugo de los dos limones. Agrega 2 huevos y calienta la mezcla a fuego medio, removiendo constantemente hasta que espese. Una vez que consigas una consistencia cremosa, retira la cacerola del fuego e incorpora 15 g de mantequilla y una hoja de gelatina hidratada previamente en agua fría. Mezcla bien hasta que la mantequilla y la gelatina se integren completamente. Tapa la mezcla con un poco de papel film y déjala enfriar a temperatura ambiente.

Paso 3: Montaje de la mousse
Cuando la mezcla de limón esté fría, es hora de montar la nata. Bate 200 ml de nata para montar (que debe estar bien fría) hasta que forme picos firmes. Con suavidad, incorpora la crema de limón, asegurándote de que ambos ingredientes se integren sin perder el aire que hemos conseguido al montar la nata. Este paso es crucial, ya que queremos una mousse ligera y esponjosa.

Paso 4: Humedeciendo la base
Una vez que la base está fría, humedécela con un poco de leche para que se mantenga jugosa y ayude a que la mousse se adhiera mejor. Luego, vierte la mousse de limón sobre la base, esparciendo uniformemente con una espátula. Asegúrate de que la mousse cubra toda la superficie. Lleva el pastel a refrigerar durante al menos 4 horas, aunque si puedes dejarlo toda la noche, será aún mejor.

Paso 5: Preparación del merengue
Mientras el pastel se refrigera, puedes preparar el merengue. En una cacerola, combina 150 g de azúcar con 50 g de agua y lleva a fuego medio hasta que se forme un almíbar. Una vez que el almíbar esté listo, comienza a batir 2 claras de huevo junto con una pizca de sal en un bol aparte. Cuando las claras comiencen a espumar, añade lentamente el almíbar caliente mientras sigues batiendo. Continúa batiendo hasta que el merengue esté brillante y forme picos firmes. Es importante que el merengue enfríe un poco antes de usarlo, ya que esto garantiza que mantenga su forma al momento de decorar.

Paso 6: Decoración del pastel
Una vez que la mousse ha cuajado y el merengue está listo, retira el pastel de la nevera. Utiliza una espátula o una manga pastelera para cubrir la mousse con el merengue, formando picos o cualquier diseño que desees. Para darle un toque especial, utiliza un soplete de cocina para dorar ligeramente la superficie del merengue, creando una costra dorada y ligeramente crujiente que contrasta con la suavidad de la mousse de limón.

Paso 7: Servir
Ahora que tu pastel de merengue de limón está completo, es el momento de disfrutarlo. Corta porciones generosas y sírvelo frío. Este postre es perfecto para los días calurosos, gracias a su frescura y la combinación de texturas que ofrece. Cada bocado es una explosión de sabor que, sin duda, deleitará a tus invitados.

Conclusión
El pastel de merengue de limón es una opción perfecta para quienes buscan un postre ligero y refrescante. Aunque la preparación requiere de varios pasos, el resultado final bien vale el esfuerzo. Este pastel se convierte no solo en una delicia para el paladar, sino también en una hermosa presentación que hará que tus celebraciones sean aún más especiales. Atrévete a probar esta receta y sorprende a todos con un postre que combina lo mejor del limón y el merengue en cada bocado. ¡Buen provecho!

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